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Cultura

El Mejunje: una obra de esperanza y amor

El Mejunje: una obra de esperanza y amor

SANTA CLARA, Villa Clara.- Hablar de El Mejunje es referirse, en primera instancia, a su máximo gestor, José Ramón Silverio, cuyos tenaces e infatigables esfuerzos han fructificado en un lugar emblemático en Santa Clara, en el mismo centro de la geografía cubana, que acoge cotidianamente a personas de todas las edades, etnias, sexos, condición social y preferencias sexuales.

Este 21 de noviembre de 2011 fue un día muy especial para José Ramón y los promotores que le acompañan en el proyecto El Mejunje. Desde La Habana llegaron representantes de instituciones estatales e internacionales, promotores, artistas e invitados para asistir, junto con sus asociados villaclareños, a la presentación de un volumen impreso donde se examinan las prácticas  socioculturales y humanas de ese Centro.

 La obra enfoca, entre otros temas, la educación y prevención de las Infecciones de Trasmisión Sexual y del VIH/SIDA a través de la cultura,  con una amplia, clara y definida perspectiva de respetar los intereses y la diversidad de sus públicos sin distinción de géneros y matices.

El Mejunje se fundó en 1991 como un conglomerado heterogéneo que se reunía en las ruinas de una céntrica residencia santaclareña para compartir ideas, canciones, poemas, preocupaciones y esperanzas.

El ruinoso edificio, si bien externamente muestra su edad, ha sido remozado por sus inquilinos y cuenta hoy con una bien surtida galería de arte, una pista de bailes y actos al aire libre, cafetería y sala teatro.

Aunque no es un reducto “gay”, homosexuales de uno y otro sexos que se incorporaron, buscaban en El Mejunje la unidad que les permitiera enfrentar incomprensiones y reclamar el espacio que por derecho les corresponde en la sociedad.

 Y así fueron consolidando su posición a través de la cultura y de la promoción de la salud, con el apoyo creciente de instituciones estatales, sociales, gubernamentales y políticas convencidas de la validez de este proyecto.

 En este empeño han acumulado valiosas experiencias en la aplicación del enfoque cultural en la prevención del VIH/Sida y la promoción de cambios de actitud

 El Ministerio de Salud Pública, a través del Centro Nacional de Prevención de las ITS y el VIH/SIDA, y el Ministerio de Cultura brindaron  pleno apoyo a la labor que ya desarrollaban los promotores de El Mejunje, bajo la dirección de Silverio.

 Llegó también respaldo adicional de parte de la Oficina Regional de Cultura de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (UNESCO); del Programa Conjunto de las Naciones Unidas para la lucha contra el VIH/SIDA (ONUSIDA); del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y del Fondo Mundial contra el VIH/SIDA, apoyo que aún continúa.

Es así que para José Ramón Silverio y sus colaboradores se abre la posibilidad de pasar revista al esfuerzo realizado y presentar logros, realizaciones, sueños y esperanzas.

 La confección del folleto El Mejunje y su perspectiva en el enfoque cultural de la prevención del VIH/SIDA permitió recopilar información sobre el proceso de desarrollo de las líneas de trabajo de ese centro y mostrar al país y al mundo las diversas perspectivas para abrir las puertas del conocimiento y la esperanza a los que de alguna forma u otra se acercaban  a este proyecto..

 Autoras principales del folleto son cuatro mujeres: la doctora en Ciencias de la Salud Nereida Rojo, las médicas Rosaida Ochoa, directora del Centro Nacional de Prevención de las ITS y VIH/SIDA, e Isa Álvarez, directora del Centro Provincial Villaclareño de Promoción y Educación para la Salud, e Ysel Torres, máster en Promoción y Educación para la Salud del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí. Cada una de ellas hizo su mejor esfuerzo para recoger con fidelidad la memoria histórica de El Mejunje y ponerla a disposición de los potenciales interesados.

 Desde la capital viajaron a Santa Clara para el lanzamiento el doctor Carlos Cortés Falla,  asesor técnico principal de proyectos del Fondo Mundial, y otros funcionarios de esa oficina del PNUD en Cuba.

 En palabras a la audiencia, Cortés trasmitió su profunda satisfacción y la del Sistema de las Naciones Unidas  por llevar a  feliz término este texto, contentivo de la hermosa historia de El Mejunje, entregado gratuitamente a todos los presentes.

 El volumen –dijo--  recoge los basamentos científicos del proyecto para que puedan ser replicados en otros contextos, siempre con la debida adecuación a las características socio-culturales e históricas específicas de cada territorio.

 La presentación culminó con un multifacético espectáculo cultural, donde actuaron talentos locales e invitados que viajaron desde La Habana especialmente para la ocasión.

 En un aparte con Granma Internacional, José Ramón Silverio dice que la filosofía de El Mejunje es “no imponer nada ni prohibir nada: es un lugar de avanzada, un proyecto cultural integral que hace suyos los intereses de todos los grupos poblacionales, luchando desde la ética y la estética de su programa contra prejuicios y tabúes.”

 Este noviembre de 2011 se inició en la histórica Santa Clara una nueva etapa en esta saga de El Mejunje: una que abre nuevas posibilidades para el mejoramiento  espiritual y que enseña un camino de inclusión y respeto. Es, en suma,  una obra de esperanza e infinito amor. 

¿Quién decide hoy la música que se escucha en Cuba?

¿Quién decide hoy la música que se escucha en Cuba?

La asociación de distintas ideas no se puede explicar. Leyendo en el periódico Granma el texto La vulgaridad en nuestra música: ¿una elección del "pueblo cubano"?, de María Córdova, Doctora en Ciencias sobre Arte, Profesora Titular del Departamento de Musicología del Instituto Superior de Arte, pensé de nuevo en una lúcida intervención del escritor y crítico Rafael Grillo, en una asamblea de la UNEAC.

Mi colega, refiriéndose al audiovisual, decía "no son la radio, la televisión, el cine, sus directivos, u orientaciones partidistas quienes están imponiendo el gusto en Cuba, son los vendedores de DVD que bajan por las antenas los programas, desde series hasta video clip, lo que luego ofertan, vendiendo o alquilando a quienes tienen un aparato para verlos, en su casa, rodeado de familiares, niños incluidos, sin que nadie cuestione la violencia o el sexo subido de tono".

Comparto totalmente ese criterio porque abundan las casas, algunas en muy mal estado constructivo, en las que reina un DVD con las ofertas más inconcebibles del mundo, desde los famosos Casos cerrados, bien escasos de valores, hasta películas casi pornográficas para no hablar de la violencia.

Si esto sucede con los audiovisuales, ¡qué no pasa y ha pasado desde hace décadas con la música! Antes de los DVD, cuando usábamos aquellas grabadoras inmensas, los casettes que caminaban de mano en mano no eran los que se divulgaban por la radio y menos por la televisión. A Los Beatles y hasta Silvio hubo una época de escucharlos escondidos.

Claro, ¡¡¡¡Dios me salve de comparar el Chupi chupi con esos autores!!! Pero ahora es mucho más fácil imponer un gusto, independientemente de lo que los medios de difusión promuevan: la mayoría de centros, sean particulares o estatales te reciben con propuestas musicales a muy altos decibeles donde abunda el reguetón. Cuando se trata de romancear -¡Dios o Lucifer perdone a quien pone las canciones!-, ahí están José José o Julio Iglesias o…, tan melosos y banales que lo mejor es irse para el Malecón.

Los carros, incluidos los ómnibus, también son portadores de música y a veces dan deseos de bajarse mucho antes de llegar al lugar para donde te diriges. ¡Ah, y los espacios sonoros de su casa constantemente agredidos! Porque ¿nunca Usted, lector, en un día de calor que no se puede encerrar herméticamente, ha tenido que soportar una tanda de canciones sexistas, violentas y con un lenguaje soez?

De estos temas muchas veces se ha hablado en el Caracol y en otros encuentros dedicados al análisis de los medios de difusión masiva. Siempre se ha sugerido que los directores de programas radiales o televisivos, respondan por una política de difusión coherente sin que se privilegie o se relegue género alguno. Y ciertos programas lo cumplen, otros no.

Ahora bien, Lucas no ha hecho famoso al Chupi chupi, porque por mucho que lo transmitan es una vez a la semana y debido al volumen de videosclip que llegan a este espacio, este no puede ponerse dos veces seguidas.

Hace poco entrevisté a Orlando Cruzata, uno de los mejores directores de programas y espectáculos musicales de Cuba. Entre otras cosas le pregunté si acaso su espacio de gran pegada no podía privilegiar un género sobre otro y me dijo:

Pudiera ser. En aquel momento (años 90) quienes más posibilidades económicas tenían de hacer videoclips eran los salseros, ya después eso se estabilizó porque todo el mundo cobró conciencia de lo importante que era tener un videoclip, tanto la televisión nacional como las disqueras, los músicos, y por supuesto, los realizadores.

Empezaron a aparecer videoclips de otros géneros musicales el pop, el rock, el rap, la canción, la balada cogió mucha fuerza. Es decir, que más o menos, al estar el programa al aire, mucha gente se interesó por hacer videoclips.

Después vino el boom del reguetón, que le sucede lo mismo, pero no es el mismo momento. Ya se hacen videoclips de pop, de rock, de música bailable. Ahora se hacen muchos de reguetón, aunque algunos no se ponen porque son muy primitivos, o son muy malas las letras, o son muy malos los videos.

En la misma charla hablamos de que ya no contaba con el comentario crítico, generalmente duro, de Rufo Caballero que al valorar un video clip en el programa Lucas le decía al autor desde las malas letras que utilizaba hasta el desacertado uso del color. Cruzata está buscando la forma de volver a tener ese ejercicio de opinión en el programa que era una suerte de orientación hacia que valía y que no. De Rufo estar vivo hubiera hecho trizas el texto del Chupi chupi, pero habría reconocido que se realización es aceptable. Su selección como el más popular transita por los mismos parámetros que el filme seleccionado en esa categoría en el festival de cine, y que casi nunca coincide con el premio del jurado.

Desde hace muchos años, quizás desde mi primera encarnación en la tierra, allá por la Edad Media tengo pánico por las cruzadas. Pienso que por su calidad Lucas influye en el gusto musical, fundamentalmente de los jóvenes, pero no decide en ello.

No creo tampoco que la solución sea prohibir el reguetón ni en la radio ni en ningún otro lugar. Y menos a los José José y compañía. Lo que debería exigirse a los directores de programas es que velen por el contenido de las letras en la radio y la televisión, sin excluir ningún género.

Ahora ¿cómo resolver la difusión en las casas, ómnibus, carros que amplifican esas pésimas letras?¿Vamos a eliminar la venta de los discos quemados? Todos sabemos que las prohibiciones sólo llevan a crear más expectativas y deseos de escuchar o ver lo que no se puede. Recordemos que la manzana le gustaba a Adán no por su sabor, sino porque no podía comerla y ahí mismito fue expulsado del paraíso.

Para mi la solución a este problema está a mediano plazo y depende de la educación. Niños y niñas no deben bailar reguetón como parte de los espectáculos que les montan sus maestros, porque esa melodía lleva implícito un aspecto sensual que no se corresponde con la infancia. Los medios de difusión masiva deberían dedicar mayor espacio a jerarquizar lo mejor de nuestra música y criticar, con inteligencia y argumentos, lo malo que se difunde.

Sólo la cultura engendra la maravilla de extasiarse con una buena propuesta musical o eliminarla de nuestro entorno para siempre a partir de las decisiones individuales.

Tomado de Cubahora

Ovacionan a orquesta sinfónica de Harvard en Santa Clara

Ovacionan a orquesta sinfónica de Harvard en Santa Clara

 El público presente en el teatro La Caridad, disfrutó y ovacionó la magistral actuación este domingo en la ciudad de Santa Clara de la orquesta sinfónica de The Harvard-RadCliffe, de Cambridge, Massachussets, Estados Unidos (OHR).

En el concierto, segundo que ofrecen en Cuba, los músicos interpretaron, entre otras, la Sinfonía número nueve del Nuevo Mundo, compuesta en los Estados Unidos en 1893 por el compositor checo Antonín Dvorák, así como también la Obertura cubana, del norteamericano George Gershwin.

La agrupación compartió el escenario con la Sinfónica de Villa Clara, en un espectáculo que incluyó piezas cubanas y norteamericanas.

Federico Cortese, director de la citada agrupación instrumental, dijo a la AIN que esta gira cobra gran importancia ante la necesidad de potenciar aún más los intercambios culturales entre ambas naciones.

Cortese precisó que disfrutó mucho de la presentación y la acogida del público, y calificó de fantástico el desempeño de los músicos cubanos y de su directora Irina Toledo, quienes interpretaron Preludio, del compositor húngaro Franz Liszt, además de otras obras de autores de la Isla.

La agrupación, fundada en 1808 y conformada por estudiantes de la prestigiosa universidad de Harvard, a lo largo de su existencia ha realizado giras internacionales en países como México (1962), Canadá (1972 y 2004), la antigua Unión Soviética (1984), Italia (1994), Brasil (2000) y Corea del Sur (2008), entre otros.

En su primera visita a Cuba se presentó con anterioridad en la ciudad de Cienfuegos, y cerrará su periplo en La Habana el próximo martes, donde tocará la mundialmente famosa Novena Sinfonía de Beethoven junto al Coro Nacional.

Fuente: AIN

Se alista la Feria en Villaclara

Se alista la Feria en Villaclara

Tres municipios de la central provincia cubana de Villa Clara dan los toques finales en sus preparativos para acoger las Décimo Séptima Feria Internacional del Libro que se efectuará desde el próximo lunes y hasta el domingo dos de marzo.

Además de Santa Clara, ciudad capital de la provincia, se alistan Sagua la Grande, que ya desarrolla la feria desde hace tres años, y Manicaragua, único municipio montañoso del territorio y que desde el 2007 también es sede del importante acontecimiento literario y cultural.

Como en ocasiones anteriores será el Programa Literario el plato fuerte del certamen pues en él se presentarán decenas de nuevos títulos en la mayoría de los casos con la presencia de sus autores o editores además de la venta del libro.

También habrá un programa profesional a base de conferencias y talleres sobre diversos aspectos de la literatura y su producción editorial.

Lo que más espera la población será la venta masiva de libros entre los que estarán cientos de miles de ejemplares y centenares de novedades literarias procedentes de casas editoriales cubanas entre ellas Capiro y Sed de Belleza.

Los puntos de venta fundamentales serán el Parque Vidal, el boulevard y la Plaza de Las Arcadas, y las tres librerías principales de la ciudad además del Instituto Superior de Ciencias Médicas y la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas.

Además habrá un programa infantil con su respectivo pabellón y muchas actividades de extensión en centros educacionales y productivos así como en comunidades alejadas del centro de la ciudad.

 

Por Luis Evidio Martínez-Telecubanacán

Kmilo desde el pincel de Boffill

Kmilo desde el pincel de Boffill

Boffill es un ignato irreverente en la manera de ser, pintar, fabular desde la oralidad; saludar a los amigos y hasta contar anécdotas personales en que el ingenio de cada cual saca todas las lecturas posibles de esas ensoñaciones de mitomanías que siempre lo acompañan.

En el campo de las composiciones del lienzo, la mirada primitivista, naif —inducido o espontáneo—, rebusca en los sueños y en la realidad para coronar la historia y los ancestros, la propia y la nuestra insular, a partir de la alegría del color y el re (juego) de eso que denomina el «dibujo boffilliano».

Desde hace tiempo el pintor remediano, radicado ahora en Santo Domingo, pulsa en la desacralización de la historia, de las epopeyas revolucionarias recientes, de los hombres y mujeres que conducen cada día, con el ejemplo social de los hechos, la ruta inquebrantable del devenir nacional.

Antes, afanoso, apareció en el nacimiento del siglo aquella exposición en homenaje al niño Elián González en instantes en que fue raptado por la mafia cubano-americana y luego rescatado por su pueblo, el de la Isla, gracias a la solidaridad internacional; después vinieron los lienzos que recreaban el rostro de Ernesto Che Guevara —El Orate—, los dedicados a Fidel —El Soldado Fidel—, y en la actualidad la exposición «Para ti», en la que retoma a Camilo Cienfuegos, el revolucionario de la «Sonrisa Franca» que braga todavía por las sierras y el llano.

Esta semana, en la sede de la UNEAC quedó abierta la exposición que recuerda el aniversario 76 del nacimiento del Héroe de Yaguajay, ocasión en que Boffill Rojas lo plasma de cien maneras diferentes, casi siempre, con la risa batiente, alegre y dicharachera de revolucionario a carta cabal; con el sombrero alón, el inseparable tabaco, así como la melena larga y su espesa barba, y por vestimenta el traje verde-olivo, el brazalete del 26-7 y los grados legendarios de Comandante.

El colorido, tejido ostentoso del que jamás se desmembrará el estilo pictórico de Boffill Rojas, el recreo de los rostros en primeros planos, en perfiles, en contrapicadas, propios del que ostenta una cámara fotográfica contenida en la sencilla imaginación popular, precisan en el detalle sin imperativos de barroquismos y ornamentaciones gratuitas, y detallan y ofrecen esa sensibilidad que raya en la nostalgia del niño y del adulto, apropiado de las miles de anécdotas contenidas en la oralidad de generaciones y la historiografía insular.

El artista popular confecciona su pintura con una rapidez inusitada tras el primer boceto, y todo cuaja a partir de esa obsesión por redescubrir cada una de las aristas que componen el rostro o la psicología del «biografiado retocado por su pincel»; momento en que ve y decanta aspectos de la trayectoria vital de los hombres más recientes de la historia, y los imagina y enriquece, como si fueran mil maneras de concebir a Martí, a los orishas o Wifredo Lam, tal como antes hizo.

El primitivismo, la locuacidad y el esplendor oral, inmersos en la espiritualidad del artista, distinguen un modo de hacer, y también de ser en esa identidad en que el delirio y la razón estrechan insistentemente la compostura individual del creador; despojado siempre de cualquier tipo de supercherías, válidas para entregarnos con una original mirada todo nuestro entorno social y patriótico. Así está visto KMILO desde el pincel fresco y animoso de un reconstructor de historias.

 

Por  Luis Machado Ordetx

Tomado del periódico Vanguardia 

 

Conjunto Folklórico Oche en Ecuador

Conjunto Folklórico Oche en Ecuador

El Conjunto Folklórico Oche acaba de regresar de una exitosa gira por varias ciudades de Ecuador donde participó en el 57 Festival Folklórico de la Fiesta de las Frutas y las Flores. Las presentaciones fueron entre el 31 de enero y el cinco de febrero.

Oche se dedica a promover, mediante la música y la danza, las raices africanas de la cultura popular tradicional cubana.

Entre lo más destacado de la gira estuvieron dos desfiles por las calles de la ciudad de Ambato ante unas 140 mil personas en los que participaron también artistas de Canadá, Polonia, Brasil, Colombia, Bolivia y del propio Ecuador.

Hubo presentaciones en el Coliseo y el Teatro Lalama de la ciudad capital de la provincia de Tumguragua , en Pafate y en la ciudad amazónica de Puyo.

Esta fue promovida por el Consejo Provincial de las Artes Escénicas de Villa Clara en colaboración con el Comité Permanente de la Fiesta de las Frutas de Ecuador.

Por Luis E. Martínez-Telecubanacán